| Un equipo de 24 profesionales sanitarios se prepara para atender a las víctimas de una catástrofe · Es el primer hospital español que inicia esta formación
El Virgen del Rocío es el primer hospital público, en el ámbito estatal, que entrena a parte de su personal para afrontar una posible emergencia nuclear, química, biológica o radiactiva. Junto al resto de centros hospitalarios andaluces (en total son 29), el Virgen del Rocío cuenta desde este año con una unidad autónoma de descontaminación para tratar a las víctimas de un accidente o de un ataque con sustancias tóxicas antes de ser atendidas en el centro.
Un equipo integrado por 24 profesionales (médicos, enfermeros y personal de mantenimiento) realizó ayer un simulacro junto a la puerta de Urgencias del Hospital General en la fase final de un proceso de formación de este personal hospitalario en el manejo de los materiales necesarios para proceder a la descontaminación de pacientes.
Con esta dotación, 'el hospital se integra en la red asistencial ante un accidente con sustancias peligrosas', explicó ayer el doctor Antonio Fornelino, durante el simulacro. Los primeros profesionales sanitarios que atienden a las víctimas in situ, que pertenecen al 061, disponen con estos equipos de aislamiento y descontaminación desde hace alrededor de un lustro. A nivel hospitalario, el SAS ha adquirido este año, con una inversión de 3,7 millones de euros procedentes del Fondo Social Europeo, las unidades autónomas para eliminar los residuos tóxicos de las víctimas antes de su ingreso hospitalario y evitar así la contaminación de los demás pacientes en el caso de una catástrofe de estas características. Por ejemplo, 'ante el accidente de un camión que cargue cloro y afecte varias personas', añade el doctor Fornelino. Esta unidad también se desplegaría ante un posible ataque terrorista o cualquier otro incidente. En estas situaciones, los afectados deben ser aislados y permanecer en una zona específica según se haya producido un daño en cualquiera de las barreras defensivas del organismo: dermis y aparato respiratorio, principalmente.
La unidad de descontaminación, fabricada por la empresa especializada Iturri, está diseñada para desplegarse en media hora y consiste en una tienda de campaña con tres pasillos: dos laterales para las víctimas que pueden andar sin problemas, uno para hombres y otro para mujeres; y un tercer pasillo central para los pacientes que no pueden andar y que necesitan camilla y cuidados especiales. Cada paciente permanece unos cinco minutos en uno de estos pasillos donde recibe una ducha para la descontaminación de las sustancias tóxicas. Una vez que salen de esta unidad, los pacientes son atendidos en el hospital sin portar residuos peligrosos. |
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