| El presidente César Tolosa dice que no se les puede obligar a realizar algo ilegal
Javier Iturbe Heras, el sanitario sancionado por el SCS. /CELEDONIOEl derecho a la protección de la salud del personal de enfermería cobró especial protagonismo ayer. El presidente del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria, César Tolosa, señaló a preguntas de los profesionales que éstos están en su derecho a negarse a transportar las extracciones que realizan a los pacientes en su domicilio, porque va contra la ley. «Es como si les ordenan conducir a 150 kilómetros por hora por la Avenida de Los Castros, donde hay un límite de 40. Tienen que decir que no, porque nadie te puede ordenar que incumplas la ley», les dijo a los enfermeros.
Y es que algunos de los asistentes a las jornadas denunciaron que se ven obligados a transportar las extracciones que realizan a los pacientes encamados en su domicilio (sangre, heces, orina y exudados) en su propio vehículo, incumpliendo así la normativa vigente que regula el transporte de mercancías peligrosas.
Javier Iturbe Heras, practicante de Guriezo, fue suspendido de empleo y sueldo el pasado día 26 de marzo por el Servicio Cántabro de Salud por negarse a realizar el traslado de estas extracciones en su coche particular. «Bueno, en realidad, realicé el transporte pero con una variante: saqué las bolsas con las muestras por la ventanilla del vehículo. Y lo denuncié ante la Policía Local y la Guardia Civil, que hicieron oídos sordos». Como Iturbe otros profesionales de la enfermería llevan las extracciones que realizan a domicilio en su coche hasta el consultorio o centro de salud. Así, lo ratificaba también una enfermera de Santander, y en este foro se contaban anécdotas de recipientes de orina vertidos en el bolso de mano de más de una profesional. Iturbe recuerda que antes eran los familiares los que llevaban las extracciones al Centro de Salud o al Hospital. A su juicio, la solución pasa porque sea una empresa especializada quien realice el transporte, y se preserve así el buen estado de las muestras. «Pero, claro, eso cuesta dinero», concluye. |
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